Comprendiendo Las Leyendas de la Policía de Prostitución

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Comprendiendo Las Leyendas de la Policía de Prostitución

sexo cachondo  paso de los años ha traído con él leyendas increíbles y no tanto sobre los antiguos policías de prostitución. Estos tales protectores de la vida nocturna son en verdad una parte de la historia de la cultura criminal de cada país que los implementó en el pasado.

Pero ¿cómo empezaron estos protectores del mundo de la noche? Mucho antes de las leyes modernas sobre la prostitución, los policías fueron puestos encargados del control de este vice. Estos autoridades eran conocidos por los trabajadores como los 'sabuesos', quienes les imponían impuestos a la actividad y se les ofrecía protección frente a la violencia y el robo.

Esta área de oficio desempeñada por los policías también ameritaba su propia ética y moralidad. Algunas incluso dictaban que los trabajadores sexuales o prostitutas no debían buscar satisfacer a sus clientes a voluntad, sino seguir las restricciones de los sabuesos, con algunas incluso que decían que los trabajadores tenían que comportarse con decoro y respeto. Incluso si se violaban las reglas, los polis tenían cierto margen para imponer sus propias multas.

Estas personas en la sombra, siempre tratando de proteger el orden público, eran respetados, temidos y admirados al mismo tiempo. A pesar de su trabajo particularmente sucio y oscuro, los policías estaban comúnmente respaldados y respetados por los ciudadanos y la comunidad local. A menudo se convertían en los protectores de las personas más vulnerables de la sociedad.

Las leyendas de estas figuras varían según el país. Por ejemplo, en Gran Bretaña se decía que los policías de prostitución tenían el poder de detener a los clientes si se encontraban posando de machos cabrios con una trabajadora sexual. Esta leyenda se extiende a otros países que también usaron policías de prostitución, como España e Italia.

En España, los policías de prostitución eran conocidos como 'sardanas'. Estos protectores de la noche se consideraban legendarios y se les decía que tenían el poder de abrir y cerrar calles y barrios enteros. Algunos incluso se convertían en los sujetos de historias de terror sobre hombres malvados que robaban mujeres jóvenes y las vendían como esclavas.

En Italia, los policías también eran conocidos como 'padroni'. Se dice que estos protectores se mantuvieron a sí mismos y su territorio al atacar a aquellos que se metían con el negocio del "trabajo sexual". Con frecuencia se decía que había padroni que llevaban armas para detener a los clientes o a cualquiera que irrespetaran a las trabajadoras.

Mientras tanto, en Francia los policías de prostitución eran conocidos como 'barbeau'. Estos sabuesos eran los protectores de la vida nocturna de la ciudad y eran respetados mucho. Se les contaban historias de su habilidad para detener a los clientes que eran considerados demasiado viles para aceptar. También se decía que los barbeau mantenían a sus subordinados bajo control e imponían límites en la actividad sexual y el abuso de los mismos.

Una cosa sobre estos protectores de la vida nocturna que permanece es que incluso ahora, muchos siguen contando sus increíbles leyendas sucias para enseñar a los niños sobre su vulnerabilidad, valentía y responsabilidad. Las leyendas de los policías de prostitución existen para recordarnos el pasado oscuro de la humanidad y cómo el amor y el respeto por los demás son una necesidad para mantener el orden y el equilibrio.

Sin embargo, en los tiempos modernos, donde la prostitución es una práctica legal en muchos países, los antiguos policías de prostitución ya han pasado a la memoria. Estas figuras legendarias han dejado un legado de cómo la ética y la moral deben reforzarse para asegurar el bienestar de los ciudadanos.